Reproducido del blog del diputado noruego Kjell Ingolf Ropstad (KRF):
Hoy es la fecha límite para nominar candidatos para el Premio Nobel de la Paz. Junto con los miembros del parlamento Dagrun Eriksen, Jan Tore Sanner, Hans Olav Syversen, Gunnar Gunderson, Olemic Tommesen y Schou Ingjerd, he designado a Oswaldo Payá, cubano, nacido en La Habana, 29/2/1952, al Premio Nobel de la Paz 2011.
Cuba es actualmente el único país de América Latina que reprime casi todas las formas de disidencia política. Las formas de protesta van de la mano con la represión masiva. Muchos temen que la situación pueda terminar en una sangrienta rebelión. El Premio Nobel por defender la democracia del país de este líder y defensor de la no violencia será una importante contribución a una transición pacífica hacia la democracia en Cuba.
Oswaldo Payá ha sido durante muchos años el principal disidente de Cuba. Es un líder humilde con gran integridad personal que ha logrado unir a varios grupos de la oposición y disidentes que han estado luchando contra la falta de derechos humanos, bien conocidos en la población cubana. Se basa en el legado de King y Gandhi en su fe en la no-violencia y la resistencia pacífica contra la opresión. El trabajo de Payá se basa en la creencia de que todo ser humano tiene derechos inalienables. Como propugna, la lucha debe centrarse en la libertad de expresión, que él cree la base para las soluciones a los problemas de otros derechos humanos. Sólo cuando la gente se para expresar la población puede incluso encontrar una salida a los retos de Cuba.
Oswaldo Payá ha trabajado constantemente de forma pacífica por los cambios en el marco de la legislación cubana. En 1992 y 1997 trató de presentarse a las elecciones a la Asamblea Nacional, pero se le negó el registro como candidato. Paya ganó el Premio Sajarov de Derechos Humanos de la Unión Europea en 2002 por su trabajo por los derechos humanos en Cuba. Este reconocimiento fue probablemente la razón por la cual no fue detenido durante la llamada Primavera de Negro de 2003, cuando 75 disidentes líderes de su movimiento fueron condenados a largas penas de prisión.
El número de detenciones de la oposición se duplicó en 2010 en comparación con 2009, para alcanzar un total de 2074. Es evidente que el régimen teme una rebelión, aún pacífica, y con esa excusa reprender con mano dura a todo lo que puede interpretarse como resistencia. Payá y otros disidentes en Cuba, temen que el país pueda volver a ser el foco de una revolución sangrienta.
El objetivo de Payá es fundar «un pueblo nuevo, con todos los cubanos sin exclusiones, conservando lo bueno, lo humano, que los propios cubanos hemos construido en estas décadas y que la historia de Cuba nos ha legado, pero es la hora del cambio, y cambios significa libertad, derechos, reconciliación y democracia«.
Oswaldo Payá es un representante de todos los cubanos que desean una transición pacífica hacia la democracia basada en la reconciliación y el diálogo. Su fuerte posición en la oposición en Cuba se expresa en las cartas a los representantes de Noruega recibidas procedentes de 19 de los prisioneros políticos recientemente liberados, donde invitan a nominar a Paya, que representa la lucha más intensa por los derechos, la libertad y la reconciliación que nunca.
El Premio Nobel de la Paz al activista más importante de Cuba por la democracia será dar una importante contribución a la paz y la democracia a un pueblo que tanto tiempo han sido privados de sus derechos humanos y que puede servir de inspiración a todos los que luchan pacíficamente contra la opresión.
Esta nominación está firmada, de forma excepcional, por 7 diputados del Parlamento Noruego.
Dargun Eriksen (KRF)
Hans Olaf Solversen (KRF)
Kjell Ingolf Ropstad (KRF)
Ingjerd Schou (H)
Jan Tore Sanner (H)
Gunnar Gunderesen (H)
Olemic Tommesen (H)
Nota de la comunidad internauta: para Víctor Domingo, Presidente de la Asociación de Internautas, esta nominación es una excelente noticia, porque la nominación de Oswaldo Paya para el Nobel de la Paz, por su lucha por la libertades civiles en Cuba de forma pacífica y reconciliadora, pone de manifiesto que el pueblo cubano, entre otras muchas cosas, adolece de un acceso a Internet accesible, asequible y universal (1 sola hora de acceso a Internet con el monopolio ETECSA, que controla toda actividad en Internet en Cuba, cuesta la mitad del salario medio mensual de un cubano, es decir, en torno a 600 euros para un ciudadano medio español) y en consecuencia refleja que la republica de Cuba no permite ese derecho a sus ciudadanos.