Madre mía, otra campaña electoral. Y ya se están poniendo estupendos. Verán, esta mañana me he levantado y he oído que Juan Carlos Girauta, de Ciudadanos, está enfadadísimo con el PP, y así lo ha puesto de manifiesto en Libertad Digital, porque a través de un medio de comunicación le han recordado que militó hace la tana en el PSC y fue en las listas del PP en tres ocasiones.
Yo aún estoy perpleja por dos cuestiones (además de por lo infantil de la cuestión):
- Que hacer público que el número 3 de Ciudadanos (una formación que sólo tiene 10 años de vida) militó o fue en listas en Cataluña, antes de entrar en Ciudadanos, en formaciones de las que se llaman constitucionalistas se considere un ataque gordísimo y que encima, para algunos lo sea. Oigan, que no ha militado en Bildu ni en Podemos, que son fuerzas de carácter totalitario…
- Que el propio Girauta se defienda soltando exabruptos ante tal cuestión, cuando lo normal era zanjarlo con un «sí, qué pasa» o despiporrarse del burdo «ataque».
Quien los entienda, que los compre.
A mí, personalmente, me parecen mucho más relevantes las acusaciones de financiación irregular que ha destapado La Razón.