No es el soporte, es la calidad (apuntes a vuelapluma en un lunes de libranza)

La imparable caída que las avestruces no quieren ver

Si no sabes lo que es esto, no me vas a entender. Sí, es la Long Tail, y tiene ya unos cuantos añitos.

Según puede comprobar cualquiera mirando los datos de la OJD, es innegable que la venta de papel está en caída libre. Sólo en el último semestre de 2017, el derrumbe ha sido de más del 11%. Y, según no pocos expertos de los de verdad, lo que te rondaré morena.

Martin Baron, director de The Washington Post, lo tiene claro: «Los periódicos en papel no van a sobrevivir«. Al menos como los conocemos. Quedarán, creo, los que ofrezcan un verdadero producto de calidad, de contextualización y jerarquización de las noticias, con reportajes de fondo de especialistas. Es decir, los buenos. Nada de noticias de agencia que, cuando llegan al quiosco, ya están desfasadas. Es a lo que tienden medios como la Frankfurter Allgemeine.

Antonio Fernández Galiano lo resume así:

«A los periódicos de papel les quedan innumerables retos. El primero, digerir la revolución tecnológica que ha afectado a tantos otros sectores. Los periódicos deben hacer un esfuerzo de calidad, deben convertirse casi en productos de culto. Esa será la única forma que los haga indispensables aunque sólo sea para una élite intelectual influyente y con vocación para introducir cambios en la sociedad. Si lo pensamos, ese ha sido siempre nuestro papel. La ventaja que tienen los periódicos es que pueden ofrecer al lector la Historia de cada día, ordenada, jerarquizada, interpretada y filtrada por un determinado ideario. Eso significa ser una referencia, eso significa ayudar al lector a encontrarse en el mundo».

Por cierto, no hay que negar la verdad: los periódicos en España caen a mayor ritmo que los norteamericanos por falta de calidad. Si los de la Generación X, ni te cuento los Millenials, hemos dejado ya de comprar papel, si éste además viene con erratas y nos cuentan lo que ya hemos visto en el telediario… ¿qué interés pueden tener más allá de servirnos para limpiar los cristales? (siento la crueldad, pero es la verdad)

Vía 233 Grados

El mundo ya es digital.  O eso dicen, que tampoco lo tengo claro, viendo las reticencias que existen a asumir, por ejemplo, que las portadas van a dejar de tener tanta importancia, porque el acceso a las noticias (y a todo en tu vida) va a ser vía móvil y a través redes sociales, esas grandes despreciadas por quienes se creen grandes… dinosaurios. Unas redes sociales que representan ya más del 39% de los accesos a las noticias de los internautas. Un porcentaje que sube, según el estudio de DigitalNewsReport, a más del 50% en el caso del codiciado target de menores de 35 años.

O la mentalidad aún existente de que «el papel es calidad e internet charcutería», que es tanto como decir que la calidad del periodista va en función del soporte. Es uno de los mayores errores que se pueden cometer. Intuyo que se cae en él por una cierta falta de apertura mental, de reactividad ante los cambios.

Ya que estamos haciendo terapia, que el golpe sea total: asume que los intermediarios, también en el periodismo, han desaparecido. Estás en pelotas frente a tus lectores. Así que más te vale ponerte en forma para salir guapa, que diría la vecina rubia 😉

Un digital no es un periódico de papel volcado en internet. 

No, no lo es por más que el periodista o el comercial de la empresa se empeñen. Son productos diferentes. Es verdad que la publicidad en internet es más barata, pero no es menos cierto que no hay costes de distribución y que mantener un digital (de calidad) es menos oneroso que mantener un diario en papel (de calidad). Así que no hay que llorar por ello, ni mucho menos llenar la página de esos intrusivos»robas» y «banners» que ahuyentarán al lector o harán ricos a los de los AdBlocker. Hay que entender que son productos diferenciados.

Quítate ya de la cabeza el prejuicio del rollito de la «calidad es el papel». Los buenos, al digital. De hecho, es que los buenos son los que ya se han adaptado o están en vías de hacerlo.

Y apuesta por el SEO (pero no te hagas trampas a ti mismo para que los tramposos de Comscore te puntúen, que eso es pan para hoy y hambre para mañana, ni creas en gurús. El secreto del éxito en digital, como en la vida, es el trabajo constante), los contenidos propios, el audiovisual y el Branded Content. Todo ello en perfecta conjunción. Si no, tu digital estará así 👇👇👇

 

La gran ola llegará también (antes de lo que piensas) al digital

Supongamos, y es mucho suponer, que estamos ya todos en digital. Llegara la gran ola. Esa que se llevará por delante a los menos buenos. Porque no va a haber espacio para todos. Asistiremos a fusiones de digitales con otros digitales o con otros soportes. Ya está sucediendo, pero llegará a lo bestia. ¿Cómo sobrevivir a ello?

  • Si me preguntaran acerca de la redacción digital les diría que la primera medida para tener una redacción verdaderamente digital sería prohibir a sus redactores el acceso a agencias, salvo como consulta. ¿Por qué voy a leer tu producto si me ofreces lo mismo que el resto? Con entrar en sites como Europa Press voy servido. Reconozco que cada vez leo menos medios digitales. Porque todos me cuentan lo mismo. Así que leo el mío y voilà, ya está.
  • Deja de copiar a los demás, que están tan perdidos como tú. Arriesga, innova, sé disruptivo. Crea tu propio modelo de negocio.

 

  • No dejes jamás de lado las redes sociales. Un conocido digital español de reciente creación (y fracaso económico) nació despreciándolas. Sus columnistas veían cómo no podían mover sus propios artículos en Twitter. Un concepto de papel.  Un horror. Quien me conoce y sabe de quién hablo sabe lo que predije nada más salir: «se la van a pegar». Seis meses después tuvo que dar marcha atrás. Porque las redes ya lo son (casi) todo.  Y dentro de ellas, Facebook es el rey (se lleva, junto a Google, toda nuestra pasta, pero c’est la vie). 

Es obligado que tus periodistas estén en redes y que sepan entrar en tu página sin buscarla en Google. Si no, no te sirven. (Sí, ya sé que flipas con lo de buscar su propio digital en Google, pero yo lo he visto. Y también he flipado). Nadie puede hacer mejor de embajador de tus/sus productos que tus periodistas. Nadie puede aportar tanta credibilidad a tu producto como ellos. En un mundo ideal, además, leen a Juan Varela.

  • Apuesta por la opinión. Esto es algo que no están haciendo los grandes digitales (españoles). Seguro que porque alguna vez un gurú se lo dijo a alguien y a partir de ahí, todos igual. Por tanto, hacerlo diferenciará tu marca del resto.
  • ¿Pago por contenido? Limitadísimo, baratísimo, de calidad y por unidad. Y me dirán… «es que la Frankfurter que citas tiene pago por contenido». Ya, pero es que en mi Alemania casi nadie se descarga pelis ni series. Acepta la realidad y busca otras fórmulas. Porque si cierras lo que te da visitas acabarás cayendo en visitas y sin suscriptores. Mira Orbyt. Se veía venir. Personalmente no creo que el paywall vaya a funcionar, al menos de momento. El metered model que ha seguido EL ESPAÑOL (y Orbyt), tampoco parece que haya sido un éxito en España. Sí ha funcionado en Alemania (Die Welt) pero, repito, allí nadie se descarga pelis piratas. También lo ha usado el New York Post.
  • Lo de los «clubs de amigos», cuyo iniciador fue Intereconomía, sí les están funcionando a los medios de la izquierda como Infolibre. Cosas del activismo. Así que si tu línea editorial es de izquierdas, puede ser una idea.
  • Personalmente yo me iría por Blockchain. Lanzaría icon propios. Pero es que yo soy un poco atrevida. La ventaja es que te permitirá saber qué interesa realmente a tu audiencia. Lo mismo descubres que no interesas a tantos como pensabas… y te puedes reinventar. Que va a ser la continua clave de las próximas décadas.

Uy,  que me dejo la audiencia. Fun-da-men-tal no disparar a locas. Tienes que conocer a tus lectores. Tienes que invertir en ello. Si no, estarás más perdido que un pulpo en un garaje.

Y una vez hecho todo esto, hazte todas las trampas al solitario (agregaciones de tráfico etc) que quieras. Pero solo después de haber apostado por un producto de calidad.

 

PD Ya sé que me dejo cosas, pero son solo apuntes escritos en un ratito libre. Espero que te hayan dado alguna idea.

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